"La vida de los terrícolas puede ser cualquier cosa, menos
aburrida, excepto para aquellos que no tienen el suficiente sentido del humor
para reírse hasta de su propia sombra. A partir de ahí la existencia diaria
puede ser más o menos difícil, todo depende de las ganas que cada uno tenga de
crear problemas que no existen y de que la suerte le acompañe a lo largo del
camino".